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Lección 1

LA SOLTERÍA ES UN REGALO DE DIOS?

Nuestra sociedad cada vez está menos estructurada a la formalidad de comprometerse a vivir en pareja.

 

Sin embargo nada nos da más miedo de pequeños que quedarnos solos. Es algo natural en el ser humano, algo defensivo, funcional y efectivamente sí, sirve para algo, nos hace sentir protegidos y acompañados.

 

 Y solo cuando existen situaciones adversas que condicionan negativamente lo aceptable o provoca daño a nuestras vidas es que se establece un rechazo y entonces se convierte en un hábito, en huida permanente, algo que incluso nos lleva a "disfrutar" de la soledad...cuando en realidad no estamos diseñados para ello.

 

Quizá por eso, la sana relación con los demás tiene un efecto curativo en nosotros. No hay como la compañía en un momento de dolor, de bajón, de inestabilidad emocional, para tener ese punto de equilibrio que a veces necesitamos. Pero cuidado, el estar soltero no significa precisamente que estemos mal.

 

1. El texto de Proverbios 17:17 menciona que un amigo que ama es como un hermano en tiempo de angustia... 

Quizá por eso pareciese que existe una visión negativa del celibato, pero que expresa la biblia?

 

Aunque incluso culturalmente para el pueblo escogido (En el siglo I, los mismos judíos expresaban: “Cualquier hombre que no tiene esposa no es un hombre correcto”) y el mismo Talmud iba aún más lejos: “El hombre que no se casó a los 20 está viviendo en pecado”.

 

Teniendo en cuenta estos antecedentes, es asombroso descubrir la claridad que arroja en este tema el Nuevo Testamento en torno a la soltería.

 

​Pablo habla en 1a. Corintios 7:7 de la Soltería como un “Regalo"

 

 2. Podrá considerarse la soltería un regalo...porque?

 

 El propio Señor Jesús manifestó: Que es buena “para aquellos a quienes les ha sido dada” Mateo 19:11

 

"Los discípulos dijeron a Jesús: pues si ésa es la situación del hombre respecto de la mujer, más vale no casarse.

 

El les contestó: No todos pueden comprender lo que digo, sino solo aquellos a quienes Dios les da la inteligencia necesaria.

Hay diferentes razones que impiden a los hombres casarse: unos ya nacen incapacitados para el matrimonio, a otros les incapacitan los hombres y otros renuncian al matrimonio a fin de estar más disponibles para el servicio del reino de Dios. El que pueda aceptar esto, que lo acepte."

Vemos que los discípulos consideraron que, permaneciendo solteros, se evitarían muchos problemas.

 

​Debemos resistir la implicación en algunos círculos incluso cristianos donde la soltería es lo peor…la propia Biblia nos exhorta a cuidar esa interpretación.

 

El matrimonio es deseable e instituido por Dios, y sin embargo también lo puede ser la soltería:

 

​En que nos basamos para compartir esto? Bueno, cuando Jesús pronunció las palabras de Mateo 19:10-12

 

¿Habrá insinuado que quienes deciden quedarse solteros han recibido algún don de una manera misteriosa?

 

Tenemos que analizar los motivos en que Jesús hizo estos comentarios sobre los solteros...

 

El estaba postulando una clara norma divina para los matrimonios (En respuesta a la necedad de algunos fariseos)  donde según la Ley, un hombre podía escribirle a su mujer un certificado de divorcio si descubría “algo indecente” en ella…Jesús sin violar la ley confirma que NO SIEMPRE HABÍA SIDO ASÍ (Deuteronomio 24:1-2).

 

​Por ello Jesús aclara: “Cualquiera que se divorcie de su esposa, a no ser por motivo de fornicación, y se case con otra, comete adulterio” (Mateo 19:3-9)...eso es aún mas comprometedor.

 

​Al oír aquello, los discípulos dijeron: “Si tal es la situación del hombre con su esposa, no conviene casarse”.

A lo que Jesús respondió: “No todos hacen lugar para el dicho, sino únicamente los que tienen el don. Porque hay eunucos que nacieron así de la matriz de su madre, y hay eunucos que fueron hechos eunucos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos se han hecho eunucos por causa del reino de los cielos. Quien pueda hacer lugar para ello, haga lugar para ello”

(Mateo 19:10-12).

 

​El salvador muestra que un hombre podía ser eunuco de nacimiento o por haber sufrido algún accidente o mutilación. Pero también había quienes se hacían a sí mismos eunucos en el sentido de que, aunque podían casarse, dominaban sus deseos y permanecían solteros “por causa del reino de los cielos”.

 

​En línea con lo que dijo Jesús, el apóstol Pablo explicó que aunque todos los cristianos —solteros o casados⁠— pueden servir a Dios, el soltero que “está resuelto en su corazón” a no casarse “hará mejor”.

 

¿Por qué razón? Porque los casados deben dedicar parte de su tiempo y energías a complacer y cuidar a su cónyuge, mientras que los solteros pueden entregarse a servir al Señor sin tal obligación.

 

 Estos últimos consideran esa oportunidad un “don” de Dios (1a. Corintios 7:7, 32-38).

 

CONCLUSIÓN

 

​En 1a. Corintios 7:6-7 Pablo dice:

 

​«Ahora bien, esto lo digo como una concesión y no como una orden. En realidad, preferiría que todos fueran como yo. No obstante, cada uno tiene de Dios su propio don: este posee uno; aquel, otro. A los solteros y a las viudas les digo que sería mejor que se quedaran como yo. Pero, si no pueden dominarse, que se casen, porque es preferible casarse que quemarse de pasión».

En el contexto del matrimonio y soltería, Pablo insiste en que cada cristiano tiene «su propio don».

 

Todo ello basado en el fruto del Amor, donde Dios les da a algunos el buen don del matrimonio, y les da a otros el buen don de la soltería.

​«En la medida que lo tengas, es un don de Dios, tal como el matrimonio será un don de Dios si alguna vez lo recibes. Deberíamos recibir nuestra situación en la vida, ya sea soltería o matrimonio, como un don de la gracia de Dios para nosotros».

 

La escritura dice en 1a. Corintios 7:7 “Cada uno [hombre o mujer] tiene de Dios su propio don: este posee uno; aquel, otro”. “Don” es la traducción de charisma, que es un regalo de la gracia de Dios. Así que, ya sea que estemos solteros o casados, recibimos de parte de Dios nuestro propio don de gracia especial para nuestra situación.

 

Así entonces, la soltería es un don…

El matrimonio es un don…

Cada uno es un don de un padre sabio y benigno.

 

​¿Cómo puedes saber si tienes el don de soltería? Sin ser un cliché, puedes hacer una simple prueba, preguntarse:

 

Si estoy casado, tengo el don del matrimonio; si no estoy casado, tengo el don de estar soltero».?

 

​Eso nos deja una importante implicación y aplicación:

 

​«Mis circunstancias son el don de gracia de Dios para mí, y debo aprender a aceptarlas de su mano como tal».

 

 Muchos cristianos se han resuelto en su corazón a permanecer solteros por este motivo, y los demás hacen bien en darles su apoyo, si va de acuerdo a la voluntad de Dios.

 

BENDICIONES

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